2010: Año de Drama para la Economía en Venezuela




Elaborado por: Rafael Simón Hernández J.

La verdad, no tenía pensado arrancar el año así, pero es evidente que, los eventos que han tenido lugar en materia cambiaria en Venezuela -en las últimas 60 horas- han dado píe para ello.


El Gobierno venezolano ha decretado (noche del viernes 08 de enero del recién empezado año 2010) y de una manera poco “usual” -para como se vienen dando los lineamientos en materia de cualquier índole que derive de las esferas del poder- una “devaluación” considerable del llamado “Bolívar Fuerte-BsF” respecto al dólar, que va a afectar los caminos a transitar del aparato productivo venezolano y del hombre de a píe en los próximos meses.

Venezuela, ha pasado de tener un tipo de cambio fijo de 2,15 BsF/USD a contar con un tipo de cambio “dual”. Un primer tipo o escalón de 2,6 BsF/USD para las importaciones de ciertos rubros considerados como esenciales o prioritarios, entre ellos, alimentos básicos, salud, remesas y algunas maquinarias; mientras que a otro tipo de cambio, llamado “petrolero”, y establecido en 4,3 BsF/USD habrán de ejecutarse el resto de las operaciones con el exterior.

Esto significa, por escaloncitos, tener una devaluación del 20,93% en el caso del primer tipo, mientras que la devaluación para el otro escalón es del 100%.

Los efectos que se desprenderán de todo esto serán, muy probablemente, brutales!!!

Ya Venezuela ha terminado el año 2009 con una inflación, según cifras “oficiales”, del 25,1%; pero a pesar de los aplausos entre los “hacedores de política” en el país del Caribe por ubicar al cierre de 2009 una inflación inferior a la del año inmediato anterior (2008 con 30,9%), sigue ubicándonos ésta entre los tres primeros países, a nivel global, con más alta inflación. Sólo nos ganan en esa liga, nuestros hermanos de Zimbawe.

Eso sí, pocos analistas reparan desde hace algún tiempo, en que los datos de inflación en Venezuela pudieran estar ocultando muchísima información, vistas las nuevas metodologías de cálculo empleadas y vistas las enormes distorsiones que generan para una correcta contabilidad del fenómeno los “controles” de precios, hoy presentes en una cantidad importante de rubros. Sin ese lastre o efectos distorsionantes, seguramente la inflación en Venezuela pudiera haber cerrado el año 2009 por encima del 40%. La sensación en las calles para el común de los mortales en esta materia es indescriptible…

Una devaluación, en el caso de Venezuela, no sólo puede generar importantes efectos en la dinámica inflacionaria, pues cabe recordar que la estructura industrial/productiva del país requiere para su marcha continua de la importación de un número significativo de bienes y servicios; sino también la generación de enormes efectos redistributivos de la riqueza interna. Al día de hoy, millones de personas, cientos de miles de hogares en Venezuela, han visto como de la noche a la mañana, son más pobres, son capaces de adquirir menos bienes y servicios con los recursos que generan con su quince y último, mientras que para otros agentes (aquí bien pudiera hablarse del Estado) las opciones de obtener bienes internamente se multiplican.

Evidentemente, una acción como esta pudiera generar -digo pudiera, porque en Venezuela nunca se sabe- enormes costos políticos para la clase dirigente, sobre todo, vistas las elecciones parlamentarias de este año, pero llevar adelante una acción de esta naturaleza ahora pudiera arrojar valiosa información sobre las enormes necesidades desde el punto de vista fiscal.

El negocio petrolero, explotado hasta la saciedad, genera siempre dividendos; pero Venezuela con sus nuevos modelos de intercambio hacia países “hermanos”, quienes pagan a plazos, en módicas y cómodas cuotas, deben haber propiciado, sin duda, que se cerrara el serrucho. Sólo nuestras ventas hacia los Estados Unidos son pagadas en “cash”, pero cada día vendemos menos a esa Nación y estamos, al día de hoy, rankeados en la posición 6 ó 7 dentro de su bloque de proveedores, cuando llegamos a estar -hace relativamente poco tiempo- entre los tres primeros lugares.

Ahora bien, el Gobierno con esta acción ha encontrado la manera de seguir alimentando sus fauces, y el truco está en que las importaciones que él deba hacer, las hará con un dólar de 2,6 BsF, mientras que las exportaciones petroleras que realice las convertirá internamente a 4,3 BsF, es decir, dele usted a la maquinita de hacer dinero, eso sin contar con poco más de 7.000 MM USD que se transferirá a la Tesorería por resultar “excedentarias” del nivel “óptimo” de reservas…

Lo realmente doloroso resulta, en que la medida, la “devaluación”, servirá según para “fomentar las exportaciones venezolanas”, siendo la pregunta obligada: ¿cuáles exportaciones aparte de las petroleras? ¿Para fomentar la producción interna de bienes y servicios? ¿Qué producción interna? ¿De quién? ¿Cómo? ... el enrevesado, complejo y cambiante esquema regulatorio en Venezuela, ha logrado poner contra las cuerdas a un parte significativa del aparato productivo interno privado, dejando a Venezuela hoy, prácticamente, en un puerto de lleva y trae, sin mayor producción de nada. Para muestra, vernos importando azúcar, arroz, café, sólo por contar algunos bienes.

Es importante, que demos un vistazo, por ejemplo, a nuestras Exportaciones versus nuestras Importaciones en términos FOB, correspondientes al sector “No Petrolero” en un período como 2003-2009 (Fuente BCV, en MMUSD términos FOB):

                2003     2004      2005     2006      2007     2008     2009

Exp,NP   5.201    6.797     7.573     7.606     6.370    6.010     2.440

Imp,NP  9.141   15.247   21.599   29.342   41.617   45.220   26.924


Parece que el tema de fomentar el aparato productivo y nuestras exportaciones en rubros distintos al petróleo no son cosa de un Decreto, de una acción pasajera de un día para otro.

Cuentas más - cuentas menos, ubican en aproximadamente 40% - 45% del total de importaciones en Venezuela aquellas operaciones que podrán ejecutarse al dólar de 2,6 BsF (en principio), mientras que el resto de las importaciones deberán efectuarse al dólar de 4,3 BsF. La cosa no está fácil, sobre todo si se tiene en consideración que los controles y filtros ante la Comisión De Adquisición de Divisas se mantendrán!

Ya como país hemos vivido situaciones similares, y sabemos que los resultados han sido duros, pero han resultado aún más severas aquellas acciones necesarias y drásticas para corregir el rumbo.

Valdrá con retraso decir aún “Venezuela, Feliz Año 2010”???

1 comentario:

Carlos dijo...

Saludos estimado amigo. Años sin saber de usted, distinto al facebook por supuesto. He leido tu articulo y me parece muy interesante. Creo que nuestra profesión es un tanto incomoda por lo de predecir y corregir y en el caso Chavez, en especial, no hemos dado pie con bola. Creo que tu análisis es acertado desde el punto de vista economico, pero en terminos politica hay muchas cosas que acotar. Nada me dio más risa que ver a Chavez descibrir el mundo de los bienes transables y no transables y el impacto del tipo de cambio. pero a pesar de esto, nuestra economia ya andaba a un tipo de cambio de más de 6 BsF y con baja liquidación de divisas. El punto central para ver que esta "nueva politica" ande es la liquidación; si a 4,30 van a liquidar más el efecto es reducido de esta medida. Obvio que la inflación dejo de ser un objetivo, politicamente no ha tenido efecto sobre la base de votantes del gobierno; parece tener más peso la escasez y las ayudas economicas. Este gobierno no es brillante, pero los adversarios politicos podrían cometer un error que mermaría aún más su credibilidad delante del electoral. Como dijo alguien "lo bueno es que la cosa se esta poniendo mala"