Monedas: Claves para la Recuperación...






Por: Rafael Simón Hernández J.


Muy recientemente, han sido dadas a conocer los resultados en materia de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de algunas de las principales economías del mundo, en la cual se observan pequeñas recuperaciones del Producto que provocan, en algunos especialistas, una especie de “euforia” por la recuperación y salida “evidente” (¿?) para la actual crisis económico-financiera que ha sacudido a todos en el orbe, en medidas y magnitudes distintas, pero a todos al fin y al cabo.



Las dos economías más poderosas de Europa (Alemania y Francia), según datos del BCE, se expandieron un 0,3% y un 0,7% respectivamente, datos positivos por segundo trimestre consecutivo; destacando también que, dichas cifras, pese a ser menores que las esperadas, ocurren antes y más deprisa de lo previsto.


La UE en su conjunto -incluyendo a aquellas naciones que no utilizan el euro como Reino Unido y Suecia- creció un 0.2% y pareciera dejar atrás la recesión.


Así mismo, los dirigentes de Asia en la más reciente cumbre anual del APEC, destacaron el liderazgo de la región en la recuperación de la crisis económica global, papel destacado para China e India, que registraron un crecimiento anual de más del 6%.


Por su parte, los Estados Unidos ha evidenciado, para el tercer trimestre de este 2009, un crecimiento del 3,5% de su Producto, crecimiento impulsado básicamente en el incremento en el consumo de bienes duraderos, como los vehículos (22,3%), inversión residencial (23,4%) y un incremento en los inventarios del 0,91%.


Sin duda, el tema a la salida de una parálisis generalizada en el aparato productivo (generador de bienes y servicios) pasa por poder engrasar el motor de la economía (significa en estos momentos, mucho dinero en circulación), y hacer factible la producción masiva de estos y el consumo de los mismos, consumo que debe materializarse o bien en los mercados internos o bien apelando a los mercados foráneos o de exportación.


Ahora bien, ganar espacios en los mercados de exportación es una tarea que implica, entre otras (exposición muy simple del asunto), contar con productos de calidad, efectuar su provisión de una manera segura y confiable, y contar con una moneda -que acompañe la transacción de estos bienes y/o servicios en el ámbito internacional- que genere “competitividad” a los productos locales.


Es decir, la paridad entre monedas, en un mundo moderno, en una situación tan crítica como la que vivimos se torna transcendental.


En ese sentido, los grandes bloques comerciales e institucionales en los que se divide el mundo hoy día (USA por un lado, UE por otro, China y el Restos de países en Asia, etc.), parecieran estar transitando por calles distintas, estrategias diversas, enfoques opuestos para buscar la salida a la crisis.


La curiosidad resulta en que, la “debilidad” del dólar frente a otras monedas, como el euro, favorece notablemente las exportaciones de los Estados Unidos, porque sus productos pueden ser adquiridos con cada vez menos monedas foráneas (menos euros, por ejemplo). De esta manera, los Estados Unidos (USA) enfocado en poder poner a punto nuevamente su aparato productivo, serán sin duda, quienes celebrarán antes y por lo grande la salida a la crisis.


Los expertos consideran que, la depreciación que está experimentado la moneda del Tío Sam frente al euro es insostenible al largo plazo, pero el que se mantenga esta tendencia, dependerá del tiempo necesario que se requiera para poder consolidar la marcha de su motor económico. En ese sentido es justo decir que, las autoridades del FED en USA están haciendo lo posible por mantener un dólar débil, que les permita maximizar sus opciones de producción y exportación, siempre y cuando no se desencadenen grandes inestabilidades en el mercado de divisas.


Para los europeos todo esto tiene y tendrá efectos notables en el corto y mediano plazo, puesto que, sólo por mencionar algunos aspectos relevantes:


.- El “turismo” como una industria multiplicadora de empleos, generadora de enormes ingresos y con externalidades positivas a todos los sectores correlacionados con dicho sector, se hará más caro para los bolsillos de los particulares no europeos. Es decir, lograr captar grandes flujos de turistas no europeos a la UE costará más. El cambio “euro/otras divisas” se ha fortalecido, pero eso hace que alojarse, comer, comprar en Europa sea, en comparación con otros destinos, costoso; y vale ver las posiciones que hasta ahora ostentan países como Francia, España e Italia en el ranking del turismo mundial (hay mucho que perder);


.- Las exportaciones europeas, con un euro muy fortalecido, pierden competitividad en el mercado internacional, y para países como Alemania, de una clara vocación exportadora tanto dentro como fuera de la UE, son muchos los frentes-destinos receptores de sus mercancías que se debilitan;


.- La repatriación de beneficios, en el caso de aquellas empresas europeas que generan ingresos en dólares u otras monedas en los mercados foráneos (por ejemplo, las petroleras), se ve notablemente disminuido. Unos beneficios a repatriar de USD 500 millones, pueden experimentar grandes diferencias si se hace a un tipo de cambio de 1,30 euro-dólar que a 1,50 euro-dólar.


En Asia, el tema pasa por una rendija muy ajustada, y es la renuencia de las autoridades chinas a cambiar la paridad de su “yuan” frente al dólar. Las autoridades chinas han estado efectuando en los últimos meses, operaciones gigantes de compra-venta del billete verde para intentar mantener la competitividad de sus productos, y al mantener la paridad del yuan frente al dólar, otras monedas de la región se mantienen estables, como aquellas monedas de importantes productores y exportadores (como Japón y Corea); evitando así algún tipo de revaluación de sus monedas frente al dólar que encarezcan de alguna manera sus productos en los mercados de exportación.


USA puede sacar grandes ventajas de esta “debilidad” del dólar mientras Europa se regodea con la fortaleza de su euro. Los grados de información son distintos, los conocimientos en las reglas del juego parecen evidentes y asomar la cabeza fuera de esta crisis puede resultar una cuesta muy dura de remontar para la UE…


No hay comentarios: